¿POR QUÉ MIS HIJOS RECHAZAN LAS VERDURAS?
Para ninguno es una novedad que nuestros pequeños se nieguen a recibir algunos alimentos, y las verduras sí que son esquivadas por los niños, y esto tiene una explicación científica.
Como humanos, tenemos una tendencia a preferir los sabores dulces por un tema de supervivencia, ya que el cerebro asocia los sabores amargos con peligro y los dulces como seguridad (como la leche materna), además estos son más llamativos debido a su cantidad calórica.
Ya que nuestros hijos actúan por instinto y su cerebro está preparado para asegurar su supervivencia, es normal que al principio este rechace algunos alimentos, especialmente aquellos que no sean dulces, pero una vez su cerebro racional comienza a desarrollarse ya sus gustos están instaurados.
Por esta razón es importante que, desde pequeños, acostumbremos a los niños a comer todo tipo de alimentos y en especial los que les aportan beneficios en su salud como lo son los vegetales, y aquí te traemos unas recomendaciones para que tu hijo entienda que, a pesar de que su instinto le diga lo contrario, las verduras son indispensables para nuestra nutrición.
¿CÓMO LOGRO QUE MIS HIJOS COMAN VERDURAS?
Este proceso requiere mucha paciencia y persistencia, a medida que pase el tiempo y tus hijos vayan entendiendo la importancia de estos alimentos veras un cambio en sus hábitos.
Da ejemplo en casa acompañando siempre tus comidas con alguna verdura, puedes integrarlos de una manera divertida a cada plato y desde pequeños irles dando a conocer distintos sabores para que se acostumbren a ellos.
Si en algún momento se niegan a comer este tipo de alimentos, no debes obligarlos a hacerlo pues esto solo logrará que les terminen cogiendo aún más pereza, puedes buscar diferentes maneras de animarlo o acodar en comerlos después.
Involucra a tus hijos desde el principio, pídeles que te acompañen en la preparación y así verán que comer es divertido y tendrán más ganas de probar todos sus platos, además irán aprendiendo recetas para seguir preparando en un futuro.
De seguro que con estos trucos tu pequeño se animará a adentrarse en este mundo de las verduras y poco a poco tendrá este hábito que siempre le hará bien, recuerda que todo es un proceso y que siempre habrá unos días mejores que otros, pero con paciencia y dedicación lograras que tu hijo deje de rechazar las verduras.